Después de unos años de intenso trabajo en los que Britney Spears alcanzó la cima del mundo del pop gracias a tres álbumes de ventas millonarias, la cantante americana se tomó unos meses de descanso en 2002 tras la gira promocional de su tercer trabajo y la separación de su novio Justin Timberlake. Un año después vio la luz su cuarto álbum de estudio, In The Zone, el cual destacó desde un principio por su divergencia con respecto al sonido presente en sus primeros trabajos ya que se distancia de su clásico sonido ‘teen pop’ para adentrarse de lleno en la música electrónica, aunque es un álbum muy ecléctico que incluye influencias Dance, House, R&B o Hip-Hop. Mientras que Britney Spears apenas participó en la composición de sus primeros álbumes, en «In the Zone» se involucró en mayor medida en el proceso creativo y compuso 9 de las canciones presentes en el álbum. «In The Zone» también destaca sin duda por la temática de las canciones, que muestran a una Britney más madura y cómoda con su propia sexualidad, ya que el sexo es uno de los temas principales en el álbum, además de las relaciones amorosas y es considerado el álbum más autobiográfico de la cantante hasta la fecha. Max Martin, quien fue pieza esencial en el éxito inicial de Britney Spears, no participó en este álbum por diferencias creativas y a su vez trabajó con un amplio rango de productores como el dúo noruego Bloodshy & Avant, Tricky Stewart, Guy Sigsworth, R.Kelly, Diddy o Moby entre otros. «In The Zone» debutó en el #1 de la lista americana de álbumes (su cuarto álbum ‘chart topper’ consecutivo) con más de 600 mil copias en su primera semana, las segundas cifras más altas del año por parte de una artista femenina y acabó siendo certificado doble platino en Estados Unidos con ventas superiores a los tres millones de ejemplares. Aunque resultaban unas cifras claramente inferiores a las de sus primeros trabajos, todavía se puede considerar un éxito en mayúsculas y cabe destacar que Britney se convirtió en la segunda cantante femenina con más álbumes #1 consecutivos en la lista Billboard por detrás de Janet Jackson. En el resto del mundo, también supuso un éxito comercial y alcanzó el #1 en Francia y el top 10 en Australia, Canadá o Alemania, aunque en importantes mercados como Reino Unido y España apenas fue top 15.
El single presentación del álbum fue Me Against The Music, un marchoso tema dance-pop con influencias funk, R&B y Hip Hop compuesto por Britney Spears junto a Tricky Stewart (quien también se encarga de la producción) que cuenta con la participación de Madonna, el gran ídolo de Britney y con la que protagonizó un tórrido beso en los premios MTV unos meses atrás. ‘Me Against The Music’ tuvo un rendimiento comercial moderado en la lista americana de singles y apenas ocupó el top 40, sin embargo en el resto del mundo resultó muy exitoso y alcanzó el #1 en España, Australia o Irlanda y fue top 5 en Reino Unido, Canadá o Alemania. ‘Me Against The Music’ recibió críticas tibias por parte de los expertos musicales y algunos expertos lo catalogaron como uno de sus singles menos memorables y con una presencia de Madonna poco aprovechada. Personalmente, ‘Me Against The Music’ no se encuentra entre mis canciones favoritas de Britney y recuerdo que en el momento de su lanzamiento no me llamó la atención a diferencia de todos los singles lanzados por la cantante hasta la fecha.
Como segundo single llegó el que se convertiría en uno de los singles más famosos, representativos y exitosos de la carrera de Britney Spears. Me estoy refiriendo por supuesto a Toxic, un enérgico tema dance-pop y electropop con melodía inspirada en la música Bhangra producido por Bloodshy & Avant, los cuales se convertirían en colaboradores habituales de Britney y crearían otros éxitos de la talla de ‘Piece of Me’. Toxic, cuyas letras hacen referencia a un amante peligroso y que resulta como una droga adictiva para la cantante, fue en realidad compuesto por Cathy Dennis y el dúo noruego para el álbum «Body Language» de Kylie Minogue, pero la diva australiana lo rechazó y fue a parar a manos de Britney, quien es famosa por haber dejado pasar otros hits como ‘Umbrella’. La discográfica Jive quería como segundo single del álbum ‘(I Got That) Boom Boom’ o ‘Outrageous’, pero Britney decidió lanzar ‘Toxic’ y desde luego no le falló la intuición ya que se convirtió en uno de los mayores éxitos del 2004: debutó en lo más alto de las listas de venta de Reino Unido (su cuarto single #1 en UK), Australia o Irlanda y fue top 5 en España, Francia o Alemania. En Estados Unidos, en contra de lo que pudiera parecer, Britney ha sido una artista más exitosa con sus álbumes que con sus singles y hasta la fecha sólo había conseguido un single #1 y otros dos top 10, pero ‘Toxic’ alcanzó el top 10 (#1 en el componente Dance de Billboard) y fue certificado oro. Toxic estuvo acompañado por un espectacular videoclip en el que Britney se mete en el papel de un agente secreto y recibió numerosas nominaciones. Toxic fue elogiado por los expertos musicales (quienes no ha sido muy benevolentes en general con la artista) y alabaron su adictivo ritmo y su pegadizo estribillo y gracias a él, Britney logró su único premio Grammy a mejor grabación Dance. Con más de 850 millones de reproducciones en Spotify, ‘Toxic’ es la canción más escuchada por parte del público de toda la discografía de la legendaria cantante.
Tras la excelente acogida de ‘Toxic’, como tercer single se lanzó Everytime, una balada pop a piano compuesta íntegramente por Britney y producida por Guy Sigsworth en la que pide perdón por haber hecho daño involuntariamente a su pareja (muchos vieron esta canción como la respuesta a ‘Cry Me a River’ de Justin Timberlake tras la ruptura de la relación). Everytime fue elogiada por la crítica por la emotividad en la voz de Britney y su labor como compositora y fue considerada como la canción más destacada del álbum y una de sus mejores baladas. Everytime resultó nuevamente un éxito y consiguió el #1 en Reino Unido o Australia y ocupó el #15 en la lista americana. Como cuarto single del álbum tenía previsto lanzarse Outrageous, pero mientras Britney grababa su videoclip en Nueva York, sufrió una caída durante una coreografía y se rompió la rodilla izquierda, por lo que tuvo que ser operada de urgencia y el lanzamiento del single se canceló. Dicha operación es considerada por muchos expertos como el motivo por el que Britney nunca volvió a ser la excelente bailarina que había sido hasta el momento. ‘Outrageous’ es un tema R&B up-tempo compuesto y producido por R.Kelly que destaca por su melodía hipnótica inspirada en el música del Medio Oriente y sus influencias Hip Hop, convirtiéndolo en uno de los temas más urbanos de Britney hasta la fecha. Personalmente ‘Outrageous’ es uno de mis temas favoritos del álbum y resultó una auténtica pena su cancelación como single. Cabe destacar que una parte del videoclip, inacabado por el accidente de Britney, se puede ver en el DVD «Greatest Hits: My Prerogative».
Dos de los temas más destacados del álbum, pero también muy polémicos por sus sensuales letras, son ‘Breathe On Me’, un tema dance-pop con influencia House producido por Mark Taylor (responsable de ‘Believe’ de Cher) en el que Britney relata una relación íntima con su amante y muestra un registro vocal susurrante y ‘Touch of My Hand’, una balada mid-tempo de estilo synth-pop con melodía inspirada en la música del Lejano Oriente cuyas letras hacen referencia a la masturbación femenina. Ambas canciones, favoritas de los fans desde el primer momento, fueron interpretadas en directo durante la gira ‘The Onyx Hotel’ y resultaron muy controvertidas por los bailes de naturaleza sexual de Britney junto a sus bailarines. También merece la pena reseñar ‘Showdown’, un tema synth-pop de temática sexual que supone la segunda aportación de Bloodshy & Avant al álbum o la balada electropop ‘Shadow’ que habla de los recuerdos de una relación que ha terminado y destaca por la ejecución vocal de Britney. En la edición deluxe está presente ‘The Answer’, un tema R&B producido por Diddy que demuestra que el género urbano le siente de maravilla a Britney. Mientras que el álbum «Britney» es considerado un punto de inflexión en la carrera de la cantante de Louisiana al dejar atrás su antigua imagen adolescente y mostrar una faceta más sexy, «In The Zone» nos presenta a una Britney ya adulta, más madura y cómoda hablando de sexo y resulta un trabajo original y arriesgado. En mi opinión, a pesar de que contiene hits incontestables como Toxic (mi canción favorita de Britney) o Everytime, «In The Zone» no resulta un álbum tan sólido o consistente en su conjunto como sus trabajos anteriores ya que mezcla estilos muy diferentes como electropop, dance-pop, R&B o Hip-Hop. Temas imprescindibles: Toxic, Outrageous, Touch of My Hand, Showdown, Breathe On Me, Everytime, Shadow y The Answer. Puntuación: 8/10.