Nadie puede negar que los concursos musicales de búsqueda de talentos han sido la cantera de una gran cantidad de artistas que se han convertido más tarde en super estrellas del mundo de la música. En Estados Unidos, American Idol ha sido uno de los favoritos del público y durante sus 16 temporadas ha visto nacer a importantes cantantes, empezando por Kelly Clarkson, la ganadora de la primera edición, su alumna más aventajada y quizás la que ha alcanzado las cotas más altas de éxito no sólo en Estados Unidos sino en todo el mundo, aunque también han destacado Fantasia Barrino, Jordin Sparks, Jennifer Hudson o la ganadora de la cuarta temporada y protagonista de este post, Carrie Underwood. En 2005, una jovencita de Oklahoma se presentó a las audiciones de American Idol y gracias a su espectacular voz conquistó a los espectadores y jueces de la competición y resultó la ganadora de la cuarta edición del popular concurso. El tema que cantó Carrie Underwood en la final de American Idol y le valió su triunfo, ‘Inside of Heaven’, le llevó a lo más alto de la lista americana de singles y fue el inicio de una carrera plagada de éxitos dentro del género Country. Su primer álbum de estudio, Some Hearts, fue #2 en Estados Unidos y vendió más de 8 millones de copias en tierras americanas, convirtiéndose en el disco debut más vendido dentro del género Country (superando las ventas del primer álbum de Shania Twain) y en el álbum más exitoso de un concursante de American Idol en Estados Unidos (batiendo a «Breakaway» de Kelly Clarkson) además de ser el disco más vendido durante el año 2006 en tierras americanas. «Some Hearts» no sólo obtuvo una respuesta comercial que superó ampliamente las expectativas puestas en él, sino que recibió buenas críticas de los expertos musicales y los puristas del Country por la extraordinaria voz de la cantante y por revitalizar dicho género y ello se reflejó en la gran cantidad de premios que recibió tanto Carrie como su álbum debut, ya que ganó tres premios Grammy incluyendo artista revelación, 5 premios Billboard (entre ellos álbum Country de la década) y un Academy of Country Music Award, que es uno de los premios más prestigiosos dentro de dicho género. Este álbum incluye ‘Before He Cheats’, el single más exitoso de toda su carrera, el cual logró el top 10 en la lista Billboard, destacó por su extraordinaria longevidad en las listas de venta y recibió numerosos galardones, entre ellos dos premios Grammy y un Academy of Country Music Award.
Tras un álbum debut tan exitoso y lleno de elogios podríamos pensar que su sucesor no estaría a la altura, sin embargo no fue así ya que Carnival Ride, publicado en 2007, repitió la buena acogida en la lista de ventas americana, donde consiguió el primer #1 de Carrie en Estados Unidos, fue certificado 4 veces platino por ventas superiores a los 4 millones de copias y contó con 4 singles #1 en el componente Country de la lista Billboard. En Canadá este álbum también llegó a lo más alto de su lista de ventas e hizo su primera incursión en Reino Unido y Australia. A pesar del lógico descenso de ventas con sus siguientes álbumes que ha sufrido Carrie Underwood (y el resto de cantantes) durante la década pasada debido a la piratería y el fin de la era de los CD’s físicos, tanto Play On como Blown Away, su tercer y cuarto trabajo discográfico, fueron bien recibidos por la critica y el público, lograron nuevamente #1 en Estados Unidos y fueron certificados tres y dos veces platino respectivamente, haciendo de Carrie Underwood una de las artistas de Country más importantes de la década del 2000, en ausencia de grandes competidoras como Shania Twain que se alejó del mundo de la música en 2004. Tras el exitoso ‘Blown Away Tour’, Carrie publicó un álbum de «Greatest Hits» que contenía todos sus singles además de nuevas canciones. En 2015 la atractiva cantante fue madre de un niño fruto de su relación con el jugador canadiense de hockey sobre hielo Mike Fisher y a finales de ese año lanzó su quinto disco de estudio Storyteller, que fue #2 en la lista americana de álbumes.
Tras un tiempo de descanso, Carrie Underwood lanzó a principios del 2018 un single para promocionar la Super Bowl llamado The Champion, que se trataba de un marchoso tema urban-pop que se alejaba de su habitual estilo Country. Este tema, producido por Jim Jonsin y que contaba con la colaboración del rapero Ludacris, hablaba de sobreponerse a las adversidades y sorprendió a todos por su sonido diferente. Dos años después de su último disco, la cantante de 35 años ha regresado al panorama musical con su sexto álbum de estudio, Cry Pretty, el cual ha debutado esta misma semana en el #1 de la lista americana de álbumes, haciendo de Carrie la primera cantante femenina de Country que consigue cuatro discos #1 en Estados Unidos. Además, al vender más de 260 mil copias en su primera semana, ha logrado las cifras más altas de un álbum Country desde 2015 y las mayores ventas de una artista femenina en este 2018, superando al impresionante debut de Cardi B y «Sweetener» de Ariana Grande. Aparte del gran debut en Estados Unidos, Cry Pretty también ha tenido una buena acogida alrededor del mundo y ha sido #1 en Canadá (el tercero de Carrie en dicho mercado), #4 en Australia o top 20 en Reino Unido. La mayoría de las canciones presentes en «Cry Pretty» han sido compuestas por la propia Carrie y destaca el hecho de que ha co-producido todos los temas del álbum (con la excepción del bonus track ‘The Champion’). El estilo predominante del álbum es el Country pero como novedad incorpora ciertas influencias R&B. El single presentación del álbum fue Cry Pretty, que se trataba de una desgarradora balada Country-Rock que habla sobre cómo las emociones se apoderan de ti y no puedes contenerlas. Este tema recibió grandes elogios de la crítica por la poderosa voz de la cantante y sus emotivas letras y tuvo una buena acogida en la lista de ventas americana, donde fue top 50 en Billboard y top 5 en el componente Hot Country Songs. El segundo single ha sido Love Wins, una emotiva balada mid-tempo Country-pop de carácter inspiracional que habla sobre el poder del amor. El álbum está compuesto en su mayoría por baladas de estilo Country-pop y Country-Rock entre las que destacan ‘The Bullet’ o ‘Ghosts On The Stereo’. Entre mis temas favoritos se encuentran el medio tiempo ‘Drinking Alone’, que destaca por tener un cierto aroma R&B en su melodía o ‘Southbound’, el tema más up-tempo del álbum.
Mientras que algunas cantantes originalmente encuadradas dentro del género Country han explorado otros sonidos para abrirse a un mayor público y aumentar su popularidad (como es el caso de Taylor Swift), Carrie Underwood siempre se ha mantenido fiel al Country y no ha comprometido su integridad artística. Además si comparamos a Carrie con Taylor, la primera cuenta con una carrera más sólida, coherente y consistente en Estados Unidos, ha recibido grandes elogios de sus álbumes por parte de la tradicional comunidad Country y ha obtenido numerosos premios prestigiosos, mientras que la segunda, aunque ha triunfado en el resto del mundo se ha vendido al sonido comercial, ha dado bandazos durante su carrera profesional, ha comprometido su integridad como artista y se ha involucrado en varias polémicas que le han hecho perder credibilidad. Por todo ello podríamos denominar a Carrie Underwood como la reina del Country actual y la heredera de Shania Twain, ya que sigue ofreciendo buenos trabajos como «Cry Pretty» tras más de 10 años de carrera. Temas imprescindibles: Love Wins, Cry Pretty, Drinking Alone y Southbound. Puntuación: 7’5/10.