A finales del año 2016, el cantante The Weeknd publicó su tercer disco de estudio, Starboy, el cual recibió grandes críticas de los expertos musicales por su evolución musical, debutó en el #1 de la lista americana de álbumes (su segundo trabajo que llega a lo más alto en Estados Unidos) y contó con exitosos singles como Starboy, el cual llegó al #1 en los principales mercados musicales, I Feel It Coming o Party Monster. A nivel internacional, el álbum Starboy logró una gran acogida comercial, ya que ha vendido más de tres millones y medio en todo el mundo y ha sido uno de los discos más exitosos de los años 2016 y 2017. En sus dos primeros álbumes y los mixtapes que lanzó previamente, el cantante canadiense exploraba el R&B alternativo y estaban formados por canciones de sonido oscuro y melodías dispersas, sin embargo gracias al éxito internacional del single Can’t Feel My Face (que contaba con un sonido más accesible a todo el publico gracias a su estilo electro-pop y Disco) en Starboy decidió decantarse por este sonido más comercial, y aunque podemos considerarlo un álbum de estilo R&B, contaba con influencias pop y electro-pop, lo que permitió a The Weeknd abrirse a un mayor público y convertirse en uno de los cantantes más populares dentro de este género. Starboy era un gran álbum en el sentido más estricto de la palabra ya que estaba formado por 18 temas, de los que no sobraba casi ninguno, y también se caracterizó por su longevidad en las listas de venta debido a la gran cantidad de singles extraídos, los cuales dominaron las radios y los charts de todo el mundo.
Aunque en los últimos meses surgieron rumores de que The Weeknd estaba trabajando en su siguiente álbum, a finales de marzo lanzó por sorpresa My Dear Melancholy, que no se trataba de un álbum completo, sino de un «Extended Play», el primero que publica el cantante de Toronto. Este EP está formado por 6 canciones, todas ellas compuestas por The Weeknd junto a Frank Dukes, productor musical asociado a artistas de Hip-Hop y R&B como Drake, Rihanna o Kanye West entre otros, pero más conocido por ser el responsable del último disco de Camila Cabello, aunque también han participado otros famosos productores como Mike Will Made It o Skrillex. En este trabajo, The Weeknd regresa a sus raíces musicales y explora el sonido de su primer álbum Kiss Land o sus anteriores mixtapes, ya que las 6 canciones presentes en este EP son downtempo, de naturaleza oscura, con melodía dispersa y encuadradas dentro del R&B alternativo. Aunque la promoción de este disco ha sido escasa debido a la naturaleza sorpresiva de este lanzamiento, The Weeknd ha grabado los videoclips promocionales (de manera vertical y lanzados vía Spotify) de dos temas de EP: Try Me y Call Out My Name. Mi tema favorito de My Dear Melancholy es precisamente ‘Call Out My Name’, una sombría balada downtempo que habla de un romance acabado y tiene todas las posibilidades de ser el single oficial del EP, ya que es el tema más destacado y recuerda a grandes temas del cantante como The Hills o Acquainted. En resumen, este trabajo podemos considerarlo como un aperitivo del siguiente álbum de estudio de Abel Tesfaye pero destaca por su vuelta al enigmático y misterioso sonido R&B alternativo con el que le conocimos y que mejor se adapta a la fantástica voz de The Weeknd. Puntuación: 7’5/10.