Jess Glynne se dio a conocer en 2014 gracias a su participación en el tema «Rather Be» de la banda electrónica británica Clean Bandit. Este tema al que Jess puso la voz fue un auténtico éxito en las pistas de baile de todo el mundo, logró el #1 en la lista de ventas de Reino Unido y Alemania, e incluso logró alcanzar el top 10 en Estados Unidos. Tras esta exitosa colaboración, la presencia de esta joven cantante fue requerida nuevamente por otro Dj, por lo que antes de su debut en solitario en el mundo de la música, Jess Glynne ya contaba con dos temas #1, algo de lo que muy pocos artistas noveles pueden presumir. Su primer tema fue Right Here, un marchoso tema dance-pop con influencia House y Garage que también tuvo buena acogida en toda Europa, sobretodo en su nativa Inglaterra, donde fue #6. Para terminar un 2014 lleno de éxitos, Jess lanzó otro single llamado Real Love, que contaba con la colaboración de Clean Bandit, con quienes triunfó meses atrás con el tema «Rather Be». Real Love comenzaba como una balada con piano para convertirse después en un bailable tema electro-pop influenciado por el House británico, y obtuvo nuevamente un buen recibimiento en Reino Unido, donde ocupó el #2 en las listas de venta. Además de sus marchosos temas dance-pop, el carácter sencillo y humilde de Jess Glynne y su potente voz han sido las señas de identidad de esta artista desde el principio de su carrera, lo que le ha permitido conectar con el público joven europeo y hacerse un importante hueco en el mundo del Pop. Ya en 2015, Jess siguió lanzando marchosos singles de estilo dance-pop y House, como Hold My Hand, el cual se convirtió nuevamente en #1 en UK, el primero de la cantante en solitario, o Don’t Be So Hard On Yourself, con el que siguió su racha de hits, ya que también consiguió llegar a lo más alto de la lista de singles de Reino Unido, su quinto #1, puesto que otra de sus colaboraciones, en este caso con el rapero inglés Tinie Tempah en el tema «No Letting Go» también alcanzó el #1. «Don’t Be So Hard On Yourself» fue aclamado por la crítica como una de las mejores canciones del álbum, algo que yo comparto ya que en este tema Jess muestra su increíble talento vocal y como compositora, con un poderoso mensaje sobre tomar riesgos en la vida y levantarse tras haberse caído, lo que lo convierte en un himno a la perseverancia y auto-aceptación.
Tras 4 hit singles y numerosas colaboraciones de éxito, las expectativas estaban muy altas con el primer disco de Jess Glynne, el cual se puso a la venta en agosto del 2015. I Cry When I Laugh debutó en lo más alto de la lista de ventas británica y acabó vendiendo más de un millón de ejemplares en Reino Unido, todo un éxito en nuestros días, y también tuvo un desempeño positivo en el resto del mundo. Aunque se dio a conocer con temas House/Dance, la cantante londinense declaró que sus artistas favoritos y fuente de inspiración pertenecen al mundo del R&B como Adele, Amy Winehouse, Destiny’s Child, Mary J Blige o Mariah Carey, además de Lauryn Hill, cuyo álbum «The Miseducation of Lauryn Hill» le inspiró a convertirse en compositora y cantante. Debido a estas influencias, aunque dentro del álbum domine el sonido dance-pop, podemos apreciar cierto toque Soul, lo que unido a su poderosa voz hace que «I Cry When I Laugh» no sea el típico álbum Dance vacío de contenido y superficial, sino todo lo contrario ya que Jess Glyne también destaca por sus habilidades como compositora. Como quinto single Jess lanzó Take Me Home, el primer tema en forma de balada que nos ofrecía la cantante pelirroja, y recibió muy buenas críticas debido a la emotividad que trasmite su potente voz y a las profundas letras sobre el poder del amor. Take Me Home rompió su racha de chart-toppers pero aún así fue #6 en UK, aunque se comportó de una manera moderada en las listas de venta del resto del mundo. Como colofón a un disco lleno de éxitos, se eligió como último single el tema Ain’t Got Far To Go, el cual se desmarcaba de sus anteriores temas dance-pop para mostrarnos un lado diferente de su música, ya que este tema era más sosegado e influenciado por el Soul. En resumen, no estamos ante un disco dance-pop genérico, puesto que en «I Cry When I Laugh» podemos encontrar marchosos temas Dance/House para disfrutar en las pistas de baile, pero acompañados de profundas letras y una gran voz Soul. Jess Glynne llegó para quedarse. Puntuación: 7’5/10.