Crítica de «Nashville Canyon Pt. 2» de Jessica Simpson

Jessica Simpson ha estado apartada del mundo de la música más de una década y durante estos últimos años se ha centrado en su faceta de empresaria y su vida personal. A principios del 2025 la cantante texana anunció su separación del ex-jugador de fútbol americano Eric Johnson tras 10 años de matrimonio y tres hijos en común. Jessica abandonó su mansión de Los Angeles y se mudó a Nashville para llevar una vida más sencilla y tranquila, recuperarse de su ruptura matrimonial y grabar nuevas canciones. El pasado mes de marzo vio la luz Nashville Canyon Pt. 1, un EP formado por 5 temas encuadrados dentro del género Country y compuestos por la propia Jessica con la producción de JD McPherson. Todos los sentimientos de vulnerabilidad y dolor que surgieron tras el fin de su relación con Eric Johnson se ven reflejados en este trabajo. «Nashville Canyon Pt. 1» era el primer trabajo discográfico de Jessica Simpson con material original desde 2008, cuando vio la luz el álbum «Do You Know», con el que abandonó su habitual estilo pop/R&B e incursionó por primera vez en el género Country. Mientras que «Do You Know» era un álbum de Country-pop de corte muy clásico que intentaba replicar el estilo accesible de Shania Twain o Carrie Underwood, este EP resultaba más arriesgado y profundizaba en el sonido Country-rock. Este mes de septiembre ha llegado Nashville Canyon Pt. 2, que supone la continuación del EP que vio la luz en el mes de marzo y está formado nuevamente por 5 temas de estilo Country compuestos por Jessica y producidos por JD McPherson. Las letras de las canciones presentes están centradas en la curación de las heridas provocadas por su ruptura sentimental, la honestidad y en encontrar fuerza en la vulnerabilidad. Al igual que la primera parte, las letras de «Nashville Canyon Pt. 2» resultan crudas, reales y tremendamente personales y autobiográficas.

El single presentación el EP fue Fade, un tema up-tempo Country-pop de sonido muy accesible que podría encajar en «Do You Know» ya que guarda similitudes con el estilo de ‘Come on Over’, el single presentación de dicho álbum. En ‘Fade’ la cantante relata los episodios posteriores a la ruptura con su ex-marido, cuando empieza a curar sus heridas emocionales y pasar página de aquella relación. Como segundo single se ha lanzado Hopeless Romance, una bonita balada Country-pop en cuyas letras Jessica afirma que es una romántica empedernida y sigue creyendo en el amor pese a las rupturas sentimentales y las decepciones sufridas en sus relaciones. Dentro del EP destaca ‘Reckoning’, una emotiva balada en la que Jessica afirma que su nueva vida en Tennessee le ha ayudado a aclarar su mente y encontrar la paz emocional y mental que tanto necesitaba. Sin duda ‘Reckoning’ es una de las mejores canciones de este trabajo por su profundo componente lírico y la magnífica ejecución vocal de Jessica, que brilla por su emotividad. También merece la pena reseñar ‘Your Apology’, una balada Country/folk acústica en cuyas letras la cantante afirma que ha aceptado las disculpas de su ex pero lo que ahora necesita es tiempo para estar sola y curar sus heridas.

«Nashville Canyon» es el trabajo más personal de Jessica Simpson hasta la fecha y muestra su crecimiento como artista y como persona. Ambos EP’s ofrecen el lado más maduro de la cantante y se aprecia una mejora y evolución en sus habilidades como compositora. Por primera vez la cantante texana habla abiertamente de sus sentimientos y transmite su rabia, dolor y vulnerabilidad a través de 5 canciones más que dignas. La voz de Jessica suena más grave y raspada a lo que estamos acostumbrados y ya no se obsesiona con llegar a notas tan altas como lo hacía en el pasado, sin embargo todavía hace gala de su potente y poderosa voz. Finalmente Jessica Simpson ha tomado por fin las riendas de su vida y su carrera y no es la marioneta en manos de directivos de discográfica que se veía obligada a seguir las modas imperantes y cantar canciones que no eran de su agrado. Temas imprescindibles: Reckoning, Fade y Hopeless Romance. Puntuación: 7/10.

Throwback Review: «Sweet Kisses» de Jessica Simpson

El popular show de televisión «The Mickey Mouse Club» resultó una auténtica cantera de futuras estrellas, ya que en dicho programa participaron talentosos niños que años más tarde se convertirían en actores de renombre como Ryan Gosling o cantantes de la talla de Justin Timberlake, Britney Spears o Christina Aguilera. Debido al tremendo impacto comercial y social que tuvieron Britney y Christina en el mundo de la música, las discográficas se apresuraron a lanzar al mercado ‘imitadoras’ para capitalizar este auge en el pop femenino, que vivió su mejor momento desde que Mariah Carey y Janet Jackson triunfaran en los años 90. A la sombra de Britney y Christina surgió Jessica Simpson, una eterna ‘segundona’ cuya carrera musical se vio eclipsada por el éxito sin precedentes de ambas artistas. Las señoritas Spears y Aguilera publicaron sus álbumes debut en el año 1999 y cuando ya habían conseguido ventas millonarias y contaban con una legión de fans por todo el mundo, Jessica publicó en el mes de noviembre su primer trabajo discográfico, Sweet Kisses, el cual está compuesto por 11 temas producidos por importantes nombres de la industria musical como Cory Rooney, Sam Watters, Louis Biancaniello, Evan Rogers o Carl Sturken entre otros. «Sweet Kisses» está formado principalmente por baladas pop y temas up-tempo de estilo dance-pop, aunque la influencia del sonido R&B está presente en muchas de las canciones. Mientras que la imagen de Britney durante sus primeros años era la de una Lolita sexy aunque dulce y su música estaba dirigida a un público adolescente, la discográfica de Jessica Simpson, liderada por Tommy Mottola, quiso posicionarla en el mercado como la nueva Mariah Carey y centrarse en un público de mayor edad gracias a un sonido ‘Adult Contemporary’ y una imagen más conservadora y recatada. Jessica Simpson era una joven de familia religiosa y tradicional que repitió hasta la saciedad que llegaría virgen al matrimonio y encajaba más con el tipo de artista que se llevaba a principios de los años 90 (como Mariah Carey en sus inicios) aunque lo que demandaba el público en el nuevo milenio era un tipo de cantante más sexy y desenfadada, como lo eran sus máximas competidoras.

El single presentación del álbum fue I Wanna Love You Forever, una desgarradora balada pop compuesta y producida por Sam Watters y Louis Biancaniello en la que Jessica describe sus sentimientos de profundo amor hacia un hombre de una manera que antes no había experimentado. Pese a lo arriesgado que resulta lanzar una balada tan clásica como primer single, ‘I Wanna Love You Forever’ resultó un éxito en la lista americana y alcanzó el #3. En el resto del mundo también tuvo un buen desempeño comercial y ocupó el top 10 en Canadá, Reino Unido o Australia. Este tema recibió buenas críticas por la magnífica ejecución vocal de Jessica (fue comparada al estilo de Mariah Carey o Céline Dion), su componente lírico y la madurez de la joven cantante. El segundo single lanzado fue Where You Are, una balada con uso prominente de guitarra española e influencias R&B y Latin-pop cantada a dúo con Nick Lachey, componente del grupo 98 Degrees y que se convertiría en su futuro marido. Pese a su gran calidad, este tema tuvo un mediocre desempeño comercial y apenas ocupó el top 70 del la lista americana. Tras dos baladas orientadas a un público más adulto, como tercer single fue lanzado un tema más accesible y comercial, similar al estilo presente en el álbum debut de Britney Spears. Me refiero a I Think I’m in Love with You, un tema pop up-tempo producido por Cory Rooney que nuevamente tenía una temática de amor adolescente como muchas de las canciones presente en el álbum. ‘I Think I’m in Love with You’ ocupó el top 25 en la lista americana y en el resto del mundo tuvo un mayor impacto comercial y alcanzó el top 10 en Australia o el top 15 en Reino Unido.

Dentro del lado up-tempo del álbum destacan ‘Final Heartbreak’, un marchoso tema dance-pop en cuyas letras Jessica le dice a su nuevo interés amoroso que su reciente ruptura podría ser la última y ella podría mostrarle el lado bueno del amor si inician una relación o ‘I’ve Got My Eyes on You’, un animado tema ‘urban pop’ muy en la onda de Britney y que podría aparecer en su álbum debut. Merece la pena reseñar ‘Woman in Me’, un tema mid-tempo influenciado por el sonido R&B y que cuenta con la participación de Destiny’s Child. El resto del álbum son baladas en las que Jessica se luce vocalmente e intenta imitar a sus ídolos Céline y Mariah, pero resultan un tanto insípidas y anodinas. En ‘Heart of Innocence’, que cuenta con cierto aroma R&B, la cantante texana habla sobre las virtudes de la abstinencia antes del matrimonio.

«Sweet Kisses» debutó tímidamente en el top 70 de la lista americana, lo que supuso una gran decepción para Columbia (el sello discográfico de la cantante texana), sin embargo a raíz del buen desempeño comercial del tercer single, el álbum ascendió hasta el top 25. Pese a que el debut de Jessica Simpson vendió casi dos millones de ejemplares en Estados Unidos, las comparaciones resultan odiosas y al lado de los debuts de Britney y Christina (con 14 y 9 millones de copias vendidas en tierras americanas respectivamente y singles de la talla de ‘…Baby One More Time’ o ‘Genie In a Bottle’) el álbum de Jessica no cubrió las expectativas de su discográfica y fue tachado como un fracaso (aunque hoy en día se consideraría un éxito notable).

«Sweet Kisses» es un álbum debut más que digno que cuenta con un solvente conjunto de canciones, sin embargo no resulta tan sólido como los primeros trabajos de Britney o Christina. El principal problema al que se enfrentó Jessica Simpson desde el inicio de su carrera es su falta de carisma en comparación a sus rivales, ya que fue percibida como una imitadora que ofrecía un producto más genérico y repetitivo, además poseía una imagen demasiado adulta para el público adolescente. El punto fuerte del álbum es el innegable talento de Jessica como cantante y su gran técnica vocal. Temas imprescindibles: Final Heartbreak, I Wanna Love You Forever, I Think I’m in Love with You, I’ve Got My Eyes on You, Where You Are y Woman in Me. Puntuación: 7/10.

Crítica de «Nashville Canyon Pt. 1» de Jessica Simpson

Durante la década del 2000, Jessica Simpson fue una de las llamadas ‘princesas del pop’ y gozó de cierta popularidad en el panorama musical americano, sin embargo siempre permaneció a la sombra de Britney Spears y Christina Aguilera, quienes triunfaron en todo el mundo y gozaron de mayor reconocimiento y éxito comercial. Jessica Simpson ha estado apartada del mundo de la música más de una década y durante estos últimos años se ha centrado en su faceta de empresaria y su vida personal. A principios del 2025 la cantante texana anunció su separación del ex-jugador de fútbol americano Eric Johnson tras 10 años de matrimonio y tres hijos en común. Jessica abandonó su mansión de Los Angeles y se mudó a Nashville para llevar una vida más sencilla y tranquila, recuperarse de su ruptura matrimonial y grabar nuevas canciones. Todos los sentimientos de vulnerabilidad y dolor que surgieron tras el fin de su relación con Eric Johnson se ven reflejados en su nuevo trabajo discográfico, Nashville Canyon Pt. 1, que se trata de un EP formado por 5 canciones encuadradas dentro del género Country con influencias rock, Blues y Soul. Jessica ha compuesto todos los temas presentes bajo la producción de JD McPherson. «Nashville Canyon Pt. 1» es el primer trabajo discográfico de Jessica Simpson con material original desde 2008, cuando vio la luz el álbum «Do You Know», con el que abandonó su habitual estilo pop/R&B e incursionó por primera vez en el género Country. Mientras que «Do You Know» era un álbum Country-pop de corte muy clásico que intentaba emular el estilo accesible de Shania Twain o Carrie Underwood, este EP resulta más innovador y arriesgado. «Nashville Canyon Pt. 1» es el trabajo más personal de Jessica Simpson hasta la fecha y muestra su crecimiento como artista y como persona. Este trabajo ofrece un lado más maduro de la cantante y se aprecia una mejora y evolución en sus habilidades como compositora.

El primer adelanto del EP fue Use My Heart Against Me, que se trata de un potente tema up-tempo de estilo Country-rock con influencias Blues cuyas letras hablan de volver a los brazos de un antiguo amante sin importar las consecuencias ya que solo se trata de una noche de pasión. El segundo single lanzado ha sido Leave, un auténtico himno de desamor en el que Jessica confiesa amargamente que su ruptura sentimental se ha debido a la traición y deslealtad de su pareja con otra mujer. ‘Leave’ es un tema mid-tempo Country-rock que sin duda resulta más original y arriesgado que los inofensivos temas presentes en su primer álbum de Country. El EP abre con ‘Breadcrumbs’, un tema up-tempo en el que Jessica aconseja que nadie te diga cómo tienes que ser y resulta un auténtico himno auto-afirmación y aceptación de uno mismo. La única balada presente es ‘Blame Me’, que contiene unas letras muy reveladoras en las que Jessica confiesa que no le importa que su ex le culpe de la ruptura y le anima a que cuente la verdad aún a costa de dañar su reputación. 

Jessica Simpson siempre se ha caracterizado por ser una artista poco distintiva y con un repertorio genérico e intercambiable con el de otras ‘pop stars’ similares, sin embargo en este EP por primera vez habla abiertamente de sus sentimientos y transmite su rabia, dolor y vulnerabilidad a través de 5 canciones más que dignas. La voz de Jessica suena más grave y raspada a lo que estamos acostumbrados y ya no se obsesiona con llegar a notas tan altas como lo hacía en el pasado (algo comprensible teniendo en cuenta el largo lapso de tiempo sin ejercitar sus cuerdas vocales) sin embargo todavía hace gala de su potente y poderosa voz. Tras más de una década retirada del mundo de la música, Jessica Simpson es plenamente consciente que tiene muy complicado volver a las primeras posiciones de las listas de venta como lo hizo en los albores de la década del 2000 ni quiere vivir de la nostalgia del pasado, por lo que ha tomado por fin las riendas de su vida y su carrera. Con 44 años ya no es la marioneta en manos de directivos de discográfica que se veía obligada a seguir las modas imperantes y cantar canciones que no eran de su agrado. Temas imprescindibles: Leave, Use My Heart Against Me y Blame Me. Puntuación: 7/10.

Throwback Review: «Do You Know» de Jessica Simpson

Llega un momento en la carrera de algunos cantantes, sobretodo aquellos que están viviendo un declive comercial y/o se encuentran un periodo de baja popularidad, en el que deciden reivindicar sus orígenes y regresar a sus raíces. Este cambio de dirección musical no siempre resulta verdaderamente genuino y auténtico, sino un intento por demostrar su valía y ganar credibilidad como artista, recuperar su antiguo estatus u obtener el beneplácito de la crítica musical. En el caso de Jessica Simpson, con una trayectoria de una década dentro del pop/R&B, decidió reivindicar sus raíces sureñas en 2008 e incursionó en el género Country. El sexto álbum de la cantante texana tiene por título Do You Know y está formado por 11 temas de estilo Country-pop, principalmente baladas y medios tiempos, compuestos en su mayoría por la propia Jessica junto a importantes figuras del género como Hillary Lindsey, Rachel Proctor o Victoria Banks y producidos por Brett James y John Shanks. La rubia cantante declaró que quería regresar a sus raíces sureñas en este álbum y hacer Country porque es la música con la que se crió. «Do You Know» debutó en el #4 de la lista americana de álbumes (la segunda mejor posición de Jessica tras «In This Skin», que fue #2) sin embargo las ventas fueron muy bajas y apenas superó las 170 mil copias en Estados Unidos. El single presentación fue Come on Over, un tema up-tempo Country-pop en el que la cantante pide a su amante que deje lo que está haciendo y se reúna con ella para pasar un buen rato. ‘Come on Over’ tuvo un desempeño moderado en la listas de Estados Unidos y Canadá (apenas ocupó el top 70) aunque se comportó mejor en el componente Hot Country Songs de la lista americana y alcanzó el top 20.

El segundo y último single lanzado fue Remember That, una balada compuesta por las cantantes Rachel Proctor o Victoria Banks cuyas letras hablan de violencia doméstica y en la que Jessica anima a todas las víctimas a abandonar a su agresor. ‘Remember That’ tuvo un impacto comercial mínimo y fue incapaz de entrar en la lista americana. El álbum navega en un mar de anodinas baladas, bien ejecutadas a nivel vocal por parte de Jessica pero tremendamente genéricas y formulaicas. La legendaria cantante Dolly Parton compuso la canción titular, ‘Do You Know’ e incluso participó haciendo las segundas voces. En resumen, «Do You Know» es un inofensivo álbum de Country-pop que no ofrece nada nuevo u original al género y replica el estilo accesible de Carrie Underwood o Shania Twain pero con menos gracia. El principal problema que tuvo «Do You Know» es que se quedó en tierra de nadie ya que no acabó de satisfacer a los habituales fans de Jessica Simpson, acostumbrados a su sonido pop/R&B comercial, ni a los amantes del Country, que no abrazaron su aproximación al género y consideraron a la cantante como una oportunista e intrusa. Los puntos a favor son la magnífica ejecución vocal de la cantante texana, la mayor madurez en las letras de las canciones y la mayor implicación en su faceta como compositora. Temas imprescindibles: Come on Over, Remember That, Pray Out Loud, Still Beautiful y Do You Know. Puntuación: 6/10.

Throwback Review: «A Public Affair» de Jessica Simpson

A finales de 2005 Jessica Simpson anunció la separación de su marido, Nick Lachey, tras casi 4 años de matrimonio y un famoso reality show a sus espaldas que incrementó sin duda la popularidad de ambos cantantes. En 2006 vio la luz el quinto álbum de estudio de Jessica Simpson, A Public Affair, el primero dentro de la discográfica Epic tras su salida de Columbia, con la que publicó sus anteriores trabajos. Este álbum está encuadrado dentro de su habitual sonido pop/R&B pero incorpora elementos dance-pop, synth-pop o Disco y cuenta con influencias de la música de baile de los años 80, con Janet Jackson o Madonna como referentes. «A Public Affair» no se trata del típico álbum post-divorcio lleno de canciones tristes y melancólicas que hablan del fin de un matrimonio, ya que la cantante apenas habla de su relación con Nick y se centra en su nueva etapa vital, marcada por la libertad, la independencia y las ganas de disfrutar la vida, algo que se nota en la naturaleza divertida y desenfadada de muchos de los temas que componen el álbum. Jessica participó activamente en la composición de la mayoría de las canciones presentes y contó con la producción de importantes nombres de la industria musical como Cory Rooney, Terry Lewis & Jimmy Jam, Stargate, Lester Mendez o Scott Storch entre otros. «A Public Affair» debutó en el #5 de la lista americana de álbumes (su tercer trabajo top 10) y fue certificado oro, pero apenas vendió 300 mil copias en Estados Unidos, lo que acentuaba la espiral descendente del éxito comercial de Jessica Simpson.

El single presentación del álbum fue la canción titular, A Public Affair, que se trata de un tema up-tempo de estilo synth-pop y Disco que contiene una interpolación del famoso tema ‘Ain’t No Mountain High Enough’ popularizado por Diana Ross y habla de pasarlo bien con los amigos. Este tema fue alabado por su naturaleza desenfadada y su ritmo bailable aunque recibió ciertas críticas negativas por su gran parecido a ‘Holiday’ de Madonna. ‘A Public Affair’ tuvo un buen desempeño comercial y alcanzó el top 20 en las listas de Estados Unidos, Australia o Reino Unido. La edición internacional del álbum incluía un ‘bonus track’ que se convirtió en el segundo single lanzado. Se trata de I Belong to Me, una balada pop/R&B mid-tempo compuesta por la prestigiosa baladista Diane Warren y producida por el dúo noruego Stargate, quien aporta su inconfundible sonido R&B. Este tema resulta un himno de empoderamiento e independencia en el que Jessica afirma que no necesita a alguien que le complete ni un hombre para ser feliz. Pese a ser uno de los temas más sobresalientes del álbum, ‘I Belong to Me’ tuvo un impacto mínimo en las listas de venta y fue incapaz de entrar en el Hot 100 de la lista Billboard.

Dentro del álbum destacan ‘Fired Up’, un tema R&B de sonido muy urbano producido por Scott Storch, ‘If You Were Mine’, un tema muy ochentero y bailable reminiscencia del estilo de Janet Jackson o ‘You Spin Me Round (Like a Record)’, que incluye el estribillo de la famosa canción de Dead or Alive pero cuenta con versos originales y compuestos por Jessica. En la reedición del álbum se incluye la versión de ‘These Boots Are Made for Walkin’, que fue lanzado como single un año antes y se convirtió en el tema más exitoso de la carrera de la cantante americana. En resumen, «A Public Affair» es un trabajo digno y correcto sin embargo no resulta tan sólido como sus anteriores álbumes «Irresistible» y «In This Skin» ya que contiene excesivo relleno y está formado por un conjunto de temas genéricos y poco distintivos. Además, la potente voz de Jessica Simpson no brilla tanto como en el pasado ni hace gala de su notable rango vocal. Temas imprescindibles: I Belong to Me, A Public Affair, I Don’t Want to Care, If You Were Mine y Fired Up. Puntuación: 6’5/10.

Throwback Review: «In This Skin» de Jessica Simpson

En 1999 Jessica Simpson publicó su álbum debut, Sweet Kisses, el cual gozó de buena acogida por parte del público, vendió dos millones de ejemplares en Estados Unidos y contó con el hit single ‘I Wanna Love You Forever’, que alcanzó el top 5 en la lista americana. En vez de competir directamente con Britney Spears y Christina Aguilera (las princesas del pop de aquel momento), su discográfica, liderada por Tommy Mottola, quiso posicionarla en el mercado como la nueva Mariah Carey, centrarse en un público de mayor edad y enfocarla al formato ‘adult contemporary’, ya que Jessica era una joven religiosa y tradicional con una imagen conservadora y que repetía hasta la saciedad que llegaría virgen al matrimonio. Pese a que el álbum debut de la cantante texana gozó de cierto éxito comercial no cubrió las expectativas de su discográfica (Britney y Christina vendieron 14 y 10 millones de copias respectivamente de sus álbumes debut en Estados Unidos) y se cambió de táctica para su siguiente trabajo. En 2001, Jessica Simpson regresó al panorama musical con su segundo álbum, Irresistible y reapareció notablemente más delgada, con una imagen sexy y más ligerita de ropa, siguiendo los pasos de Christina y Britney. «Irresistible» no solo destacó por el cambio de imagen de Jessica sino que marcó una evolución musical al adoptar un sonido R&B y dance-pop más moderno y actual. Importantes nombres de la industria musical como Cory Rooney, Louis Biancaniello, Ric Wake, Sam Watters, Darkchild o Walter Afanasieff participaron en este ambicioso proyecto y crearon un conjunto de canciones marchosas y bailables entre las que se encontraban los singles ‘Irresistible’ y ‘A Little Bit’, los cuales tuvieron un impacto comercial moderado. «Irresistible» debutó en el #6 de la lista americana y fue certificado oro por ventas superiores al medio millón de unidades, una cifra notoriamente inferior a la de su álbum debut y que nuevamente supuso una decepción para su discográfica.

En 2002 Jessica Simpson se casó con el cantante Nick Lachey (conocido por formar parte del grupo 98 Degrees) y juntos protagonizaron el infame reality show ‘Newlyweds’, que resultó un éxito de audiencia y atrajo la atención del público por la personalidad naif e ingenua de Jessica, quien representaba a la perfección el estereotipo de ‘rubia tonta’. Un año más tarde vio la luz su tercer álbum de estudio, titulado In This Skin y que se trata de un trabajo eminentemente pop aunque resulta más diverso que sus predecesores e incluye elementos R&B, dance-pop, Country, folk o pop/rock. «Irresistible» fue tachado de sobreproducido por los críticos musicales por lo que la cantante de Texas quiso que su nuevo álbum tuviera un sonido más orgánico y con mayor instrumentación en vivo. A diferencia de sus dos anteriores trabajos, Jessica se involucró en gran medida en el proceso creativo del álbum y participó en la composición de la mayoría de las canciones presentes, las cuales fueron producidas por Ric Wake, Billy Mann, Damon Elliott, Rob Fusari o Keith Thomas entre otros. En el momento de su publicación, «In This Skin» debutó en el #10 de la lista Billboard y fue certificado oro, sin embargo en 2024 el álbum fue reeditado con nuevas canciones y experimentó una gran subida hasta el #2. «In This Skin» tuvo una larga vida comercial y acabó vendiendo más de tres millones de copias en Estados Unidos, convirtiéndose en el álbum más exitoso de la carrera de Jessica Simpson. A nivel internacional tuvo un desempeño comercial moderado y alcanzó el top 15 en Australia y el top 40 en Reino Unido. Con unas ventas totales superiores a los 7 millones de copias, «In This Skin» se puede considerar un éxito notable.

El single presentación del álbum fue Sweetest Sin, una balada pop/R&B escrita por la afamada compositora Diane Warren y producida por Ric Wake cuyas letras hacen referencia a la pérdida de la virginidad. ‘Sweetest Sin’ tuvo un impacto comercial mínimo y no fue capaz de entrar en el Hot 100 de la lista Billboard. El segundo single lanzado fue With You, un tema pop/R&B mid-tempo compuesto por la propia Jessica y producido por Billy Mann en cuyas letras habla del amor incondicional que siente por Nick y lo cómoda que se siente cuando está con él. ‘With You’ tuvo un buen desempeño comercial y alcanzó el top 10 en Reino o Australia y el #14 en Estados Unidos, su segunda mejor posición en la lista americana. El tercer single lanzado, perteneciente a la reedición del álbum, fue Take My Breath Away, que se trata de una versión del famoso tema del grupo Berlin, conocido mundialmente por formar parte de la banda sonora de la película ‘Top Gun’. Este tema tiene un significado especial en la vida de Jessica ya que era la canción que sonaba cuando besó por primera vez a Nick, por lo que decidió grabarla para la reedición del álbum. ‘Take My Breath Away’ tuvo una buena acogida por parte del público y alcanzó el top 15 en Australia o Canadá y el top 20 Estados Unidos. Otra versión incluida en la reedición del álbum es ‘Angels’ de Robbie Williams, que también fue lanzado como single aunque tuvo un impacto comercial mínimo.

Dentro de «In This Skin» destacan ‘Forbidden Fruit’, un tema dance-pop de sonido electrónico que supone el momento más up-tempo del álbum o ‘In This Skin’, un tema con influencias Country que resulta un auténtico himno de auto-aceptación y en el que Jessica reflexiona sobre la pérdida de peso que experimentó por deseo de su discográfica para encajar en la industria musical. El álbum está formado principalmente por baladas en las que Jessica derrocha su enorme torrente vocal, como por ejemplo ‘I Have Loved You’, que cuenta con ciertas influencias pop/rock y folk y habla de un tiempo en el que rompió con Nick y permanecieron separados. Dentro del catálogo musical de Jessica Simpson, mi álbum favorito es «Irresistible», que contiene el sonido R&B típico de la década del 2000 y está formado por un conjunto sólido de temas marchosos y pegadizos, sin embargo «In This Skin» resulta un trabajo más maduro y muestra el lado más personal y vulnerable de la cantante. Pese a su peculiar personalidad, no hay duda de que Jessica es una poderosa y potente vocalista y en este álbum además asume un mayor papel en la composición de su música. Temas imprescindibles: With You, Forbidden Fruit, In This Skin, I Have Loved You, Take My Breath Away y Sweetest Sin. Puntuación: 7/10.

Crítica de «Irresistible» de Jessica Simpson

A finales de los años 90 se produjo un apogeo del fenómeno fan, ya que ‘boy bands’ y ‘girl bands’ como Backstreet Boys, N’Sync o Spice Girls triunfaron en todo el mundo y el pop más comercial vivió uno de sus mejores momentos. Durante esos años también aparecieron importantes cantantes femeninas surgidas de programas infantiles que lograron un éxito sin precedentes en el mundo de la música. Por supuesto me refiero a Britney Spears y Christina Aguilera. Debido a la tremenda repercusión que tuvieron ambas cantantes con sus primeros álbumes, las discográficas se apresuraron a lanzar al mercado ‘imitadoras’ para poder aprovechar este auge en el pop femenino, que vivió su mejor momento desde que Madonna, Whitney Houston, Janet Jackson y Mariah Carey triunfaran en los años 80 y principios del 90. A la sombra de Britney y Christina estuvo Jessica Simpson, una eterna ‘segundona’ cuya carrera musical se vio eclipsada por el éxito sin precedentes de las señoritas Spears y Aguilera. Ambas artistas publicaron sus álbumes debut en el año 1999 y cuando ya habían conseguido grandes ventas y acumulaban millones de fans por todo el mundo, Jessica Simpson hizo lo propio y publicó su primer álbum, titulado Sweet Kisses, a finales de ese año. Mientras que la imagen de Britney durante sus primeros años era la de una Lolita sexy aunque dulce y su música estaba dirigida a un público adolescente, la discográfica de Jessica Simpson, liderada por Tommy Mottola (ex-marido de Mariah Carey), quiso posicionarla en el mercado como la nueva Mariah y centrarse en un público de mayor edad gracias a un sonido Adult Contemporary y una imagen más conservadora y recatada. Jessica Simpson era una joven religiosa y tradicional que repitió hasta la saciedad que llegaría virgen al matrimonio y encajaba más con el tipo de artista más tradicional que se llevaba a principios de los años 90 (como Mariah Carey en sus inicios) aunque lo que demandaba el público en el nuevo milenio era un tipo de cantante más sexy y divertida, como lo eran sus máximas competidoras. Pese a que el álbum debut de Jessica Simpson gozó de buena acogida, vendió casi dos millones de ejemplares en Estados Unidos y contó con el hit single I Wanna Love You Forever, las comparaciones resultan odiosas y al lado de los debuts de Britney y Christina (con 14 y 10 millones de copias vendidas en tierras americanas respectivamente y singles de la talla de ‘…Baby One More Time’ o ‘Genie In a Bottle’) el álbum debut de Jessica no cubrió las expectativas de su discográfica y fue visto como un fracaso (aunque hoy en día se consideraría un éxito notable). Simplemente tuvo la mala suerte de coexistir en la misma época que ellas.

La estrategia de marketing para el siguiente álbum de Jessica Simpson podríamos resumirla como «donde dije digo, digo Diego» ya que el intento de su discográfica por convertirla en la nueva Mariah Carey y diferenciar a la cantante texana de sus competidoras mediante una imagen conservadora y poner el énfasis en su voz más que en su físico no surtió efecto. Por ello en 2001, una Jessica Simpson más delgada, ligerita de ropa y mostrando una imagen sexy irrumpió en el panorama musical con su segundo álbum de estudio, titulado Irresistible. Para este nuevo trabajo pasaron de vender a Jessica como una jovencita conservadora que quería llegar virgen al matrimonio a posicionarla como la competencia de unas Christina y Britney cada vez más provocativas. Además del radical cambio de imagen, la música de Jessica también evolucionó y dejó atrás sus emotivas baladas pop para adoptar el sonido de moda, el R&B, que triunfaba durante aquellos años. «Irresistible» está compuesto en su mayoría por marchosos temas pop/R&B con influencia dance-pop, además de varias baladas reminiscencia de «Sweet Kisses». Algunos de los productores musicales del momento trabajaron en este álbum, como Cory Rooney (quien ya participó en su anterior álbum), Louis Biancaniello, Sam Watters, Ric Wake, Rodney ‘Darkchild’ Jerkins o Walter Afanasieff (el responsable de los mayores éxitos de Mariah Carey), quien produjo las baladas del disco.

El single presentación del álbum fue el tema que da título al álbum, Irresistible, un marchoso tema pop/R&B producido por el sueco Anders Bagge que contaba con el típico sonido urbano de principios del 2000 y en el que Jessica mostraba su nueva imagen más sexy y provocativa. Este single resultó un éxito moderado en las listas de venta y ocupó el top 20 en Reino Unido, Canadá o Estados Unidos. El segundo single lanzado fue A Little Bit, un tema pop up-tempo con influencia R&B producido por Rick Wake, conocido por su trabajo previo con Anastacia, Jennifer Lopez o Mariah Carey. Este marchoso tema, en cuyas letras Jessica pide a su pareja cambios esenciales para mejorar la relación de pareja, fue incapaz de repetir la buena acogida de ‘Irresistible’ y fracasó en las listas de venta, por ello ningún sencillo más fue lanzado de este álbum. Un tercer single fue planeado, la magnífica balada ‘When You Told Me You Loved Me’ compuesta y producida por Walter Afanassieff, pero su lanzamiento fue cancelado. Esta dramática balada, muy al estilo Mariah, es uno de los puntos fuertes del disco ya que Jessica nos muestra su enorme torrente de voz. Uno de los temas más destacados del álbum y que hubiera sido un gran candidato a single es ‘Forever In Your Eyes’, un medio tiempo R&B/pop con uso prominente de guitarra española e influencias Latin-pop compuesto por el que se convertiría en su futuro marido, Nick Lachey. De entre los temas up-tempo que abundan en el álbum, destacan el potente y enérgico ‘Hot Like Fire’ producido por Cory Rooney y en el que Jessica se deshace de su imagen virginal y canta abiertamente de sexo, el marchoso tema dance-pop ‘What’s It Gonna Be’ que podría pertenecer al álbum «Oops!» de Britney, ‘Imagination’, otro tema up-tempo R&B con una base melódica influenciada por el Hip Hop o ‘I Never’, también producido por Darkchild y que contaba con su inconfundible sonido R&B del año 2000.

51y2DZ3Ic2L«Irresistible» debutó en el #6 de la lista americana de álbumes y fue certificado oro por ventas superiores al medio millón de unidades, una cifra claramente inferior a la de su álbum debut y también a la de su siguiente disco de estudio, In This Skin, que se convertiría en el trabajo más exitoso de su carrera musical. «Irresistible» recibió críticas principalmente negativas de los expertos musicales por ser un álbum genérico y sobreproducido, sin embargo personalmente lo considero un álbum sólido, muy infravalorado y que resulta claramente superior a sus siguientes trabajos discográficos, en los que ha pasado del dance-pop al Country sin encontrar su estilo propio. Definitivamente, Jessica Simpson no es santo de mi devoción ya que durante su carrera musical ha tocado todos los palos intentando adoptar un estilo musical basado en lo que está de moda en vez de seguir propio su criterio. Además responde al estereotipo de ‘rubia tonta’, como demostró ampliamente en su reality show. Sin embargo, dejando a un lado su peculiar personalidad y su falta de carisma, tengo que reconocer que «Irresistible» es uno de mis discos favoritos ya que combina el sonido R&B de principios del 2000 con una gran voz como la de Jessica y cuenta con buenas canciones que pudieron haber triunfado de la mano de otro artista. Sin duda, Jessica Simpson es muy talentosa vocalmente y tiene un gran atractivo físico, sin embargo ha tenido un éxito muy limitado y reducido a Estados Unidos y su carrera siempre ha estado a la sombra de Britney y Christina. Pese a todo, merece la pena rescatar del olvido este álbum, desconocido para muchos, pero que representa la esencia del ‘urban pop’ que adoptaron muchos cantantes durante los primeros años de la década del 2000 debido al auge del sonido R&B. Temas imprescindibles: Irresistible, Forever In Your Eyes, When You Told Me You Loved Me, A Little Bit, I Never y What’s It Gonna Be. Puntuación: 8/10.