En los inicios de su carrera, Taylor Swift era una de la figuras más prometedoras de la escena Country estadounidense y poseía una imagen de ‘girl next door’ que encajaba con los cánones de la conservadora sociedad americana, sin embargo con el paso de los años no solo ha dejado atrás su pasado Country sino que se ha deshecho de la imagen dulce con la que conquistó al público. Durante los últimos años la cantante de Pensilvania se ha ganado una mala reputación en la industria musical: ha desvelado todo tipo de detalles de sus ex-novios a través de sus canciones, ha protagonizado peleas con compañeras de profesión y se ha visto envuelta en varias polémicas, lo que ha provocado que la antigua ‘novia de América’ ahora sea percibida por el público como una artista sin escrúpulos y una ‘víbora’ vengativa y rencorosa. Taylor Swift abandonó la imagen de la ‘pop star’ perfecta y asumió su papel de chica mala en su sexto álbum de estudio, Reputation, cuyo título hace referencia al escrutinio que sufrió la cantante por parte de los medios de comunicación sobre su imagen pública y su vida privada tras su ascenso a la fama. En el aspecto musical, «Reputation» destaca por su viraje hacia el sonido electrónico que Taylor Swift inició en su anterior álbum y está formado principalmente por temas synth-pop y electropop, aunque cuenta con influencias R&B e incorpora bases de la música urbana como Trap y Hip Hop. Las letras de las canciones presentes en el álbum están inspiradas en sus relaciones amorosas, pero Taylor también planta cara a todas las personas que han arremetido contra ella (es más que evidente su tono combativo y vengativo en el álbum). Este trabajo también destaca por el hecho de que Taylor utiliza la técnica sing-rap en muchas de las canciones y ofrece un menor rango vocal al habitual, además de adoptar un estilo al cantar más cercano al de un artista R&B. La primera mitad del álbum está producida por Max Martin y Shellback (responsables de sus dos anteriores álbumes y artífices de su viraje hacia el pop) mientras que la segunda parte cuenta con la producción del que se convertiría en su mano derecha y habitual colaborador Jack Antonoff. «Reputation» debutó en el #1 de la lista americana de álbumes (su quinto ‘chart topper’) y se convirtió en su cuarto trabajo en superar el millón de copias en su primera semana a la venta. El álbum ha vendido dos millones y medio de copias en tierras americanas y ha sido certificado triple platino en Estados Unidos pero ha conseguido unas ventas notoriamente inferiores a las obtenidas por «Red» y «1989».
El primer single del álbum fue Look What You Made Me Do, un oscuro tema electropop con influencias Hip Hop y electroclash producido por Jack Antonoff que cuenta con la interpolación del hit noventero ‘I’m Too Sexy’ de Right Said Fred y en cuyas letras Taylor lanza dardos envenenados a las personas que han arremetido contra ella (presumiblemente está dirigida a Kanye West tras su incidente en los premios Grammy). Dentro de la canción aparece la famosa frase ‘la antigua Taylor no puede ponerse al teléfono ahora, porque ha muerto’. ‘Look What You Made Me Do’ resultaba una apuesta bastante decepcionante como single presentación debido a su carácter poco memorable y la ausencia de un estribillo potente, lo que lo convertía en uno de sus ‘lead singles’ más flojos hasta la fecha. ‘Look What You Made Me Do’ alcanzó el #1 en la lista americana, convirtiéndose en el quinto single #1 de Taylor en la lista Billboard, sin embargo su reinado fue breve y rápidamente desapareció de las listas de venta tras su gran ‘hype’ inicial. El segundo single lanzado fue …Ready for It?, un tema electropop de carácter mid-tempo que incorpora elementos del Trap y el pop industrial. En este tema Taylor utiliza metáforas relacionadas con actividades criminales como atracos a bancos para hacer referencia a un nuevo romance. ‘…Ready for It?’ tuvo un desempeño comercial positivo y alcanzó el top 5 en las listas de venta de Estados Unidos o Australia y el top 10 en Reino Unido.
Como tercer single se lanzó End Game, un tema mid-tempo pop/R&B con influencias Hip Hop producido por Max Martin y Shellback y que cuenta con la participación de Ed Sheeran y el rapero Future. En las letras de ‘End Game’ los tres artistas hablan de cómo encontrar el amor verdadero a pesar de los chismes que se inventan sobre ellos. El cuarto single lanzado fue New Year’s Day, una balada acústica producida por Jack Antonoff cuyas letras hablan de cómo Taylor y su novio limpian su casa tras la fiesta de Nochevieja, implicando el grado de complicidad que tiene la pareja y cómo van creando recuerdos juntos. Como quinto single se lanzó Delicate, un tema synth-pop de sonido ambiental producido por Max Martin y Shellback cuyas letras hacen referencia a la vida privada y al estatus de celebridad de Taylor Swift y en la que se cuestiona si su reputación puede afectar a un romance que está empezando. ‘Delicate’ se convirtió en un sleeper hit en la lista americana y acabó alcanzando el top 15 en Estados Unidos. Como último sencillo promocional en tierras australianas se lanzó Getaway Car, un tema synth-pop producido por Jack Antonoff que describe los esfuerzos de Taylor para terminar una relación usando un romance con una nueva persona. Merece la pena reseñar ‘Gorgeous’, uno de los temas más pop del álbum y en cuyas letras Taylor se ve tentada a engañar a su novio o ‘I Did Something Bad’, un oscuro tema que habla de la relación de la cantante con chicos que intentan aprovecharse de ella y cómo ella sigue la misma estrategia y saca provecho de ellos. En resumen, «Reputation» muestra una evolución musical por parte de Taylor Swift pero cuenta con una producción repetitiva y poco original. Temas imprescindibles: Getaway Car, …Ready for It?, I Did Something Bad, Delicate y Gorgeous. Puntuación: 6/10.
